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Mitos y Verdades sobre la cirugía

mariavequiz

Tal vez has pensado en realizarte alguna intervención quirúrgica de manera programada por te ha invadido muchas dudas e interrogantes con respecto a la tipo de intervención, tratamiento y recomendaciones medicas

Es importante saber que muchas personas en la actualidad tienes muchos mitos sobre el entorno quirúrgico

Aquí te aclararemos cosas que debes sabes antes, durante y después de la cirugía basándonos en investigaciones científicas como lo son el protocolo ERAS (Enhanced Recovery After Surgery, por sus siglas en inglés: Recuperación Acelerada Después de Cirugía).

Que debemos saber antes de una intervención quirúrgica:

  • Es cierto que los médicos saben lo que hacen? Bueno todo paciente debe estar informado siempre del procedimiento que se le va realizar e incluso debe estar por escrito y autorizado por usted, así tendrá mayor confianza con su médico tratante.
  • Debo permanecer más de 8 horas en ayuna antes de la cirugía? La verdad es que no se recomienda un ayuno de solidos no más de 6 horas y de líquidos hasta 2 horas antes de la intervención
  • Es cierto que debo prepararme el intestino antes de una intervención de colon al menos 24 horas antes? Lo verdad es que No ya que no aumenta el riesgo de dehiscencia de la anastomosis ni  de infecciones de herida quirúrgica. Sin embargo, la preparación del intestino en cirugía colon -rectal es todavía controvertido.
  • No debo entrar a una intervención quirúrgica con las uñas pintadas? No, esto se debe a que los médicos utilizan las uñas como un indicador de la saturación del oxígeno en la sangre. Si este comienza a bajar, el lecho ungueal empieza a ponerse de color azul. El esmalte impediría ver ese cambio de coloración que alerta de que algo va mal. 
  • Es recomendable usar antibióticos antes de una intervención?  Si, se recomienda profilaxis antibiótica intravenosa que consiste en una dosis única de antibióticos
  • Es recomendable unas medias antitrombóticas? Si, se recomienda su uso ya que es la terapéutica más efectiva como profilaxis antitrombótica

Que hacer después de una intervención quirúrgica:

  • Debo una vez operado iniciar dieta al día siguiente o a los días siguientes? Se recomienda  la ingesta precoz de alimentos líquidos ya que disminuye las complicaciones postoperatorias y reduce la estancia hospitalaria según el protocolo se propone iniciar la dieta a las cuatro horas
  • Es bueno estar en cama sin movilizarse después de la intervención la inmovilización desencadena una serie de eventos desfavorables en el paciente por lo que se aconseja su movilización dos horas fuera de la cama el mismo día de la cirugía, y seis horas los días sucesivos.
  • Puedo ducharme y lavarme el cabello después de una cirugía? Lo habitual es que si lo haga 24 horas después de la intervención o una vez que el medico revise la herida, ya que no hay ninguna contraindicación.
  • Puedo rasúrame desde de la cirugía? Si,se puede rasurar o cortar el cabello después de un intervención al menos 3 días después realizarlo.
  • Puedo comer pescado después de la cirugía? El pescado, además de su gran aporte en vitaminas, minerales y omega 3, es fuente de proteínas, nutriente esencial que contribuye a la cicatrización de las heridas. Por eso, las personas que hayan sido operadas pueden incluir este alimento en su dieta sin ningún problema.
  • Puedo fumar después de la cirugía? No debería fumar en ningún caso. Fumar altera la función de las células, ralentizando todo el proceso de cicatrización
  • Puedo tener relaciones sexuales?  Es recomendable esperar un tiempo prudente para tener relaciones sexuales (cuando no tenga dolor, la herida este cicatrizada o no tenga ninguna contraindicación) de al menos 4 a 8 semanas, esto va depender el tipo de intervención practicada.

Tu que mitos sobre la cirugías tienes? deja tu comentario y te sabré  ayudarte y si  te guste el tema, te animo a que me sigas en mi blog, y en mis redes sociales

APRENDE

Apendicitis aguda, cosas que debes saber.

mariavequiz

Seguramente has escuchado de alguna persona cercana a ti, o incluso tú, que haya sufrido de una enfermedad llamada Apendicitis Aguda. Que es eso? Bueno, primero quisiera explicarte 5 cosas que debes saber de ella y porque acudir al médico.

1. ¿Qué es la apendicitis?

                Es una enfermedad inflamatoria infecciosa del apéndice cecal, ubicada en el colon o intestino grueso cerca del punto donde se unen el intestino delgado, mide aprox. 8-10 cms, el apéndice es un pequeño tubo cerrado, hueco que se  comunica con el colon, que al inflamarse se le denomina Apendicitis Aguda.

2. ¿Por qué aparece la apendicitis?

                Esta se da por obstrucción de la luz en su interior del apéndice creando una inflamación esto se debe a distintas causas

                Materia fecal espesada (fecalito): No es más que acumulación de materia fecal en la luz del apéndice, es la más frecuente debido a una dieta baja en fibra.

                Hiperplasia linfoidea: Esto se debe a la aparición del desarrollo de folículos linfáticos submucosos alrededor de la base del apéndice.

                Cuerpo extraño y microorganismos: Ocurre cuando están presentes agente infeccioso como Yersinia, Salmonella, Shigella, virus de la papera, coxsackievirus B, adenovirus, actinomyces, etc.

                Tumor carcinoide: es cuando estamos en presencia de un crecimiento anormal del tejido que recubre el intestino  lo que ocasiona la inflamación del apéndice y por consiguiente la aparición de la enfermedad.

3. ¿Cuáles son los síntomas y el diagnóstico de la apendicitis?

                Los síntomas clásicos de la apendicitis incluyen:

  • Dolor molesto en la boca del estómago (epigastrio) o alrededor del ombligo (mesogastrio), luego a las pocas horas el paciente refiere que el dolor se fue hacia el lado derecho inferior del abdomen, es constante y va aumentando poco a poco de intensidad
  • Pérdida de apetito
  • Náuseas y/o vómitos poco después de que comience el dolor abdominal
  • Fiebre de 38,5 a 40 ° C

                El diagnóstico de la apendicitis se basa en la exploración física y en la historia clínica, complementado con análisis de sangre, orina y otras pruebas como las radiografías simples de abdomen y la ecografía abdominal, para descartar otras patologías que cursan con dolor abdominal.

4. ¿Cuál es el tratamiento de la apendicitis?

                Una vez diagnosticada la apendicitis aguda, el paciente debe recibir tratamiento médico y quirúrgico.

                La apendicitis es una emergencia médica que requiere una cirugía inmediata para extraer el apéndice. Si no se trata, el apéndice se perforará, derramando materiales infecciosos en la cavidad abdominal. Esto puede ocasionar peritonitis, una inflamación grave del revestimiento de la cavidad abdominal (el peritoneo).

5. ¿Se puede prevenir la apendicitis?

                No hay forma de prevenir la apendicitis. Sin embargo, Los pasos principales para prevenir la apendicitis se basan en:

  • Llevar una dieta rica en fibra, te recomiendo consumó de las frutas y verduras y, sobre todo, los cereales integrales.
  • Evitar el estrés y mantener un descanso adecuado.

                Te recomiendo acudir a la brevedad con el especialista Cirujano para su valoración antes que el proceso sea más avanzado generando así, un mayor riesgo de complicaciones.

APRENDE

Razones por las cuales debo ir al Médico

mariavequiz

Todas sabemos lo que debemos hacer para cuidar de nuestro cuerpo: comer sano, dormir adecuadamente, hacer ejercicio, tomar agua, evitar vicios como fumar, beber, uso de drogas entre otras. El problema radica en que muchos de nosotros no le hacemos caso cuándo vamos al médico o no los escuchamos realmente lo que nos dice sobre nuestra salud

Esto  se debe a diferentes razones:

1. No nos gusta lo que nos dice


Todas sabemos cuáles son nuestras debilidades, y no nos gusta que otra persona nos señale nuestras debilidades. Lo sabemos, pero disfrutamos hacerlo y no nos gusta escuchar cuando alguien nos recuerda el daño que le hacemos a nuestro cuerpo.


2. Creemos que sabemos más que el Dr.


Nos gusta pensar que tenemos más conocimientos  que un médico. Solemos escuchar primero las recomendaciones de nuestros amigos, vecinos y padres antes que la de un profesional.


3. Estamos muy ocupadas


Por extraña razón, la salud nunca es prioridad hasta que tiene que serlo. Vamos al médico  hasta que algo deja de funcionar porque vivimos inmersas en una sociedad de solución y no de prevención.


4. Lo consideramos como una debilidad


Vivimos en una cultura donde la enfermedad es un signo de débiles, por lo que ir al médico es como aceptarle a la sociedad que somos más débiles que los demás.


5. Tememos un diagnóstico negativo


Una de las causas por la que no vamos al médico es por temor de enfrentarnos con una enfermedad real. Nos da pánico que podamos tener algo que nos cambie la vida y no nos permita continuar con la rutina que conocemos.

 Las relaciones nunca son fáciles. Dudas, desconfianza e incluso celos pueden minar en una la relación médico-paciente. Pero, ¿quién tiene la culpa en este último caso? Siempre se suele buscar un responsable de porque no somos sanos. Sin embargo, pocas veces se suele pensar que esa es una labor de dos en la que el paciente también debe implicarse para que la relación siga funcionando.

COMO SER UN BUEN PACIENTE

Aunque normalmente se pone el foco en el médico, hay algunas excepciones que centran su mirada en los pacientes y su responsabilidad en la práctica clínica. Es el caso del ‘Manual del Paciente’ que elaboraron Pfizer y el Defensor del Paciente de Madrid en 2008, donde se recogen algunas recomendaciones para que el enfermo ayude a que la relación prospere. Entre ellos destacan los que tienen que ver con la comunicación de los síntomas y los problemas que se padecen. Hay que acabar con la premisa de que “todo el mundo miente” y establecer una buena comunicación desde el principio sobre todo lo que preocupa al paciente. En este sentido, la guía recomienda llevar apuntado de casa todos los problemas que se quieren comentar para que no se quede nada en el tintero, así como apuntar lo que dice el médico. También aconseja preguntar qué hace el médico, pero sin interrumpirle, por ejemplo, en las exploraciones físicas; siempre se puede preguntar al final. Por último, señala que implicarse en el diseño del tratamiento es una buena idea para conseguir que la terapia funcione mejor. Nada que no sea de sentido común.

Y tú, ¿por qué no vas al médico?